sábado, 27 de abril de 2013

Prestige


El Prestige fue el buque insignia de The Marmalade Company. En un principio no estaba pensado para la guerra, pero conforme The Marmalade Company iba creciendo como empresa, fue añadiéndole más y más mejoras y cuando descubrieron el poder devastador que entrañaban las naranjas y su mermelada, decidieron añadir cañones y demás armas “pa ver que tal”.

Fue destruido por un grupo desconocido (entre los cuales había un ruso que más tarde fue capturado por los Galegans) y esa es la razón por la que resulta tan complicado investigar sobre dicho barco.
Pocos detalles se conocen acerca de esta maravilla de la ingeniería naval. Pero con nuestra ardua investigación hemos conseguido recopilar algunas piezas que nos ayudan a imaginar cómo era el Prestige:

Tenía un sistema de torpedos con cuerda de manera que tras dispararlos, podían recuperarlos si no acertaban.

Su radar, a pesar de ser muy potente, rápido e inteligente, iba a pedales, por lo que era necesario que algún tripulante estuviera pedaleando todo el día (probablemente algún cadete)

Sin embargo, las cámaras frigoríficas, donde guardaban las naranjas, eran alimentadas por unas pilas super-potentes que hacían que dichas cámaras estuvieran en funcionamiento durante más tiempo del que podía estarlo una Game-Boy-Ladrillo. Por lo demás, estos almacenes simplemente eran sitios donde hace mucho frío, tanto que incluso el pingüino terrorista que capturaron cuando viajaban cerca del mar antártico (aparentemente siempre tuvieron muchos problemas con los pingüinos terroristas al navegar por esas aguas) se quejaba todas las noches de los putos catarros que cogía (según comenta el cuaderno de bitácoras casi destrozado del capitán)

Por otra parte, la tripulación era de lo más variopinta:

Había un grupo de criminales porretas que tenían que trabajar gratis para su reinserción en la sociedad.

Había un pequeño grupo de frikis cuyas madres les habían obligado a trabajar allí porque no soportaban que estuvieran todo el día en casa encerrados jugando al WoW, a la maquinita y escribiendo Blogs de mierda.

Luego estaba el grupo de los chungos (los que petaron el barco) del cual no se sabe demasiado, solo que el ruso echaba de menos al vodka y todas las noches lloraba cuando bebía un vaso de agua y luego gritaba “Почему не водка?”. Por lo último que hemos descubierto, deducimos que dentro de este grupo también había un tipo muy muy vago que murió de hambre porque la comida estaba muy lejos, un enano con muy mala hostia que se cabreaba por todo, algún tipo de filósofo colgado que se las pasaba apuntando todo lo que se le pasaba por la cabeza y que tenía una obsesión exagerada de escribir su nombre en todas partes y muchos otros tipos extraños.

Y por último, el Capitán Willy Sailornoob, que en realidad no tenía ni puta idea de navegar (de hecho el título de capitán lo ganó en una apuesta) y todo lo tenían que hacer los demás. Eso sí, por lo que parece, el cabrón era un pozo sin fondo cuando se trataba de comer y beber.

Poco más hemos conseguido descubrir con las escasas pistas que quedaron flotando a la deriva. Solo algunos cuadernos y diarios estúpidos y algunas revistas guarras de los tripulantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Mójate Soldado!